Un estudio ha arrojado luz sobre la complejidad del tinnitus al descubrir que este trastorno auditivo activa una porción significativamente más extensa del cerebro en comparación con un sonido convencional, según el sitio .- Imagen de KamranAydinov en Freepik.
La conexión entre el tinnitus y una actividad cerebral sorprendentemente amplia podría ser clave para comprender la dificultad en su tratamiento, según informan investigadores.
El estudio, publicado en la revista Current Biology, se centró en un hombre de 50 años afectado por tinnitus en ambos oídos, asociado con pérdida auditiva.
Durante episodios de mayor y menor intensidad del tinnitus, los investigadores observaron la actividad cerebral del participante.
Los resultados revelaron una diferencia significativa en la actividad cerebral generada por el tinnitus en comparación con los sonidos externos normales captados por los oídos.
Will Sedley, coautor del estudio y miembro de la Universidad de Newcastle en el Reino Unido, destacó que la actividad vinculada al tinnitus abarcaba una proporción considerable de la corteza auditiva y otras áreas cerebrales.
Lo más sorprendente fue el descubrimiento de que la actividad directamente asociada con el tinnitus se manifestaba de manera extensa, abarcando una gran parte de la medición cerebral.
En contraste, las respuestas cerebrales a un sonido reproducido que imitaba el tinnitus se localizaron en una zona más reducida, según explicó Sedley.
Los investigadores sugieren que estos hallazgos proporcionan una explicación del por qué el tinnitus resulta tan desafiante de tratar, y plantean la posibilidad de desarrollar nuevas terapias.
Según Phillip Gander, coautor del estudio y miembro de la Universidad de Iowa, la presencia extendida del tinnitus en diversas áreas cerebrales sugiere que este no solo se limita a compensar la pérdida auditiva, sino que también se infiltra activamente en sistemas más amplios del cerebro.
Estos conocimientos podrían marcar el camino hacia enfoques innovadores para abordar el tinnitus y mejorar las opciones terapéuticas disponibles.
Fuente: intramed.net