Un equipo de investigadores de los EE. UU. ha determinado el origen de la pérdida auditiva causada por el cisplatino, un medicamento empleado en diversos tratamientos de quimioterapia.
El cisplatino es un potente fármaco que está presente en distintas formas de quimioterapia destinadas a tratar ciertos tipos de cáncer. Un grupo de científicos acaba de hallar las razones por las que este medicamento causa pérdida de audición.
Entre el 10 y el 20 por ciento del total de los pacientes con cáncer tienen recetado cisplatino o algún otro fármaco a base de platino. Como consecuencia del uso de estos medicamentos, entre el 40 y el 80 por ciento de los adultos y aproximadamente la mitad de los niños padecen pérdida de audición permanente.
El fármaco se acumula en el oído interno
Los científicos midieron y realizaron un seguimiento del cisplatino en el tejido del oído interno de ratones y humanos y hallaron una acumulación de ciertas formas de cisplatino en esta área. Los resultados sugieren que el oído interno absorbe el cisplatino con facilidad pero no lo elimina de la misma manera.
En la mayoría de las partes del cuerpo, el cisplatino desaparece en cuestión de días o semanas una vez finalizado el tratamiento. Sin embargo, el fármaco permanece mucho más tiempo en el oído interno.
Estos hallazgos permiten entender cómo es de perjudicial el cisplatino para el oído interno. Además, gracias a ellos, se explica por qué la pérdida auditiva es más grave en el caso de los niños que en el caso de los adultos y por qué esta va a peor después de cada tratamiento o puede incluso aparecer mucho tiempo después de que el tratamiento haya finalizado.
En su estudio, los científicos afirman que el oído interno no es capaz de eliminar el cisplatino y, debido a la larga exposición al medicamento, las células del oído interno, imprescindibles para la audición, acaban muriendo.
La stria vascularis
El equipo de científicos también determinó que los intentos para prevenir la pérdida de audición provocada por el cisplatino deberían centrarse en la región del oído interno llamada stria vascularis, ya que es allí donde se encontraba la mayor acumulación del fármaco.
La stria vascularis contribuye al mantenimiento de la carga eléctrica positiva en el líquido del oído interno que necesitan ciertas células para detectar el sonido. Por ello, los investigadores concluyeron que la pérdida de audición provocada por el cisplatino se debía precisamente a la cantidad de fármaco que permanecía y se acumulaba en la stria vascularis.
La investigación la dirigió la Dra. Lisa L. Cunningham, jefa del Instituto Nacional Estadounidense de la Sordera y Otros Trastornos de la Comunicación (NIDCD, siglas en inglés) dependiente de los Institutos Nacionales de la Salud de los EE. UU. (NIH, siglas en inglés), quien afirmó que los hallazgos de su estudio “sugieren que si podemos evitar que el cisplatino se introduzca en la stria vascularis del oído interno durante el tratamiento, podremos proteger a los pacientes con cáncer para que no desarrollen pérdida de audición provocada por el cisplatino”.
El estudio titulado “El cisplatino permanece en la cóclea de forma indefinida tras la quimioterapia” se publicó en la revista Nature Communications en 2017.
Fuentes: ncbi y Nature Communications, hear-it