En el vasto campo de la salud auditiva, donde la prevención y el tratamiento de los acúfenos juegan un papel crucial, la terapia cognitivo-conductual emerge como una herramienta valiosa. – Imagen de Freepik.
Enfocándonos en la gestión de las reacciones de los pacientes hacia los acúfenos y los trastornos de maladaptación, esta terapia se erige como un faro de esperanza y mejora en la calidad de vida de quienes la experimentan.
Contrario a la creencia popular de que el tratamiento se basa únicamente en información y discusiones sobre los acúfenos, la terapia cognitivo-conductual desentraña sus beneficios a través de un enfoque holístico.
En su núcleo, se lleva a cabo un análisis profundo de la conducta del individuo, integrando técnicas de entrenamiento de relajación y diversas estrategias cognitivas que nutren la capacidad del paciente para afrontar los desafíos auditivos.
Este método de tratamiento se erige como una hoja de ruta para aprender a lidiar con los acúfenos, y sus resultados son palpables.
La reducción de las molestias asociadas con los acúfenos se convierte en un logro tangible, acompañado de elevaciones en el estado de ánimo y efectos positivos en síntomas adicionales como la cefalea tensional, mareos, tensión muscular y trastornos del sueño.
Para maximizar la eficacia de la terapia cognitivo-conductual, algunos profesionales han adoptado manuales específicos que detallan el entrenamiento de relajación, la planificación metódica de actividades y la reestructuración cognitiva.
Curiosamente, esta forma de terapia ha trascendido las fronteras físicas y se ha implementado con éxito como formato de autoayuda en internet.
Los resultados revelan que, a pesar de las percepciones iniciales de los pacientes sobre la credibilidad de la terapia en línea en comparación con las sesiones grupales, ambas modalidades muestran mejoras similares.
Es interesante destacar que la terapia en línea consume menos tiempo del terapeuta y demuestra ser más costo-efectiva.
En la búsqueda de la eficacia, se ha realizado una comparación entre el consejo terapéutico y la terapia cognitivo-conductual en pacientes con acúfenos.
Los resultados son alentadores, ya que ambos enfoques demuestran mejoras similares en las molestias provocadas por los acúfenos.
Esto subraya la versatilidad y la efectividad de la terapia cognitivo-conductual como una herramienta valiosa en la gestión de los acúfenos y sus impactos en la salud auditiva.
Fuente: Congreso de la Sociedad Andaluza de Otorrinolaringología y Patología Cérvico-Facial