Los baños veraniegos elevan hasta en un 50 por ciento la aparición de otitis externa, de modo que es la causante del 84 por ciento de los casos, y afecta sobre todo entre niños y adolescentes, según expertos de ALAIN AFFLELOU Audiólogo. – Imagen de Daniel Perrig en Pixabay.
Los especialistas recomiendan prevenir la otitis mediante la utilización de tapones hechos a medida, ya que permiten sellar completamente el oído para evitar la entrada de agua. Se trata de tapones especiales para su uso en piscinas o playas, no se deforman tras su uso y flotan en el agua en caso de que se salgan.
Se recomienda para el correcto uso de los tapones: colocar cada tapón en su oído, antes de colocarlo revisar que tanto el tapón como el oído estén perfectamente secos, desinfectar los tapones cada dos días con algodón y alcohol, al bucear con tapones tener en cuenta que a partir de los tres o cuatro metros de profundidad podrían saltar debido a la presión, recurrir a los tapones únicamente cuando estés en contacto con el agua en caso de padecer drenaje o alguna supuración en el oído, y utilizarlos a medida ya que los convencionales “no son eficaces” para prevenir una otitis externa.
Síntomas de la patología
La otitis puede ser externa (cuando se inflama el conducto auditivo externo debido a una causa infecciosa) u otitis media (inflamación del oído medio debido a una contaminación de bacteria o virus). Todos aquellos que alguna vez la han padecido saben que su principal síntoma es un dolor severo en el oído, que se hace aún más doloroso cuando presionamos hacia dentro o fuera el lóbulo del oído.
Algunas veces se inflama y se torna rojo y si la infección es fuerte se pueden producir secreciones debido a la formación de pus en la entrada del oído, y además, puede aparecer fiebre. Con estos síntomas es fácil que perdamos algo de audición y nos resulte difícil escuchar.
Vía: noticias.lainformacion.com