Persona preocupada por zumbidos en los oídos mientras evalúa posibles causas del tinnitus.

Tinnitus: una guía básica para entenderlo y saber por dónde empezar

Artículos Consejos Terapias

El tinnitus afecta a millones de personas en todo el mundo y, aunque puede parecer desesperante, existen caminos para entenderlo y abordarlo. En este artículo te compartimos una lista práctica, basada en experiencias reales, para ayudarte a identificar posibles causas de este molesto síntoma. (Foto de freepik.es).

El primer paso: consulta médica

Antes que nada, lo más importante es acudir a un profesional de la salud. Incluso si sientes que tu caso “no es tan grave” o si sospechas que solo tienes congestión nasal, lo ideal es no subestimar el problema. El tinnitus no es una enfermedad en sí misma, sino un síntoma de que algo más está ocurriendo en tu cuerpo.

Un médico general puede orientarte hacia los especialistas adecuados, como un otorrinolaringólogo, un fisioterapeuta o incluso un odontólogo, según sea el caso.

¿Por qué suenan tus oídos?

Tu cuerpo es una red compleja y, muchas veces, el origen del tinnitus no está en los oídos, sino en otras partes. Aquí te dejamos una lista de áreas del cuerpo que los expertos recomiendan evaluar:

  • Cuello y hombros: La tensión muscular en esta zona puede afectar directamente tu percepción auditiva.
  • Nariz y senos paranasales: Una congestión prolongada o crónica puede generar presión anormal.
  • Oídos: Claro, los oídos también deben revisarse. Tapones de cera, infecciones o incluso daños por ruido fuerte pueden influir.
  • Columna y espalda: Problemas posturales, escoliosis o contracturas pueden alterar la conexión neurológica con el oído.
  • Mandíbula: Esta es una de las grandes olvidadas. Problemas como el bruxismo, la mordida desalineada o los dientes flojos pueden generar presión sobre los nervios que se comunican con el oído.
  • Presión arterial: Hipertensión o cambios bruscos pueden intensificar la percepción del zumbido.

¿Estrés? Tu peor enemigo oculto

Uno de los factores más subestimados en los casos de tinnitus es el estrés emocional y físico. ¿Has notado que cuando estás más tenso o cansado, el zumbido se hace más fuerte? No es casualidad.

El estrés provoca tensión muscular, afecta el sueño, la alimentación y hasta el sistema inmunológico. Todos estos factores pueden agravar el tinnitus. Por eso, una parte esencial del tratamiento está en evaluar tu estilo de vida:

  • ¿Tu trabajo es muy demandante?
  • ¿Has pasado por momentos de ansiedad o preocupación últimamente?
  • ¿Duermes bien y haces pausas durante el día?

Responder honestamente a estas preguntas puede darte pistas sobre qué ajustar.

La relación entre mandíbula y tinnitus

Recientes estudios han confirmado que muchas personas que sufren tinnitus tienen problemas en la articulación temporomandibular (ATM). Esta zona está íntimamente conectada con el oído, y cualquier alteración, incluso leve, puede generar zumbidos.

El simple hecho de apretar los dientes con frecuencia, tener una mordida desalineada o usar ortodoncia puede ser un disparador. Si nunca lo habías pensado, este podría ser un excelente punto de partida para revisar con un especialista en odontología o kinesiología.

¿Y los medicamentos?

Aunque parezca increíble, algunos fármacos pueden tener como efecto secundario el tinnitus. Analgésicos, antibióticos y medicamentos para tratar la hipertensión o la ansiedad pueden influir. Por eso es importante informar siempre al médico qué estás tomando, incluso si es algo que parece inofensivo.

¿Qué puedes hacer desde hoy?

Aunque el tinnitus puede tener múltiples causas, también hay múltiples caminos de mejora. Aquí van algunas recomendaciones prácticas para empezar cuanto antes:

  • Visita a un fisioterapeuta o masajista profesional si sientes tensión muscular en cuello, espalda o mandíbula.
  • Incorpora ejercicios de relajación como yoga, estiramientos suaves o meditación diaria.
  • Mantén una rutina de actividad física regular para mejorar tu circulación y fortalecer el sistema nervioso.
  • Adopta una dieta balanceada, baja en sal, cafeína y alimentos procesados.
  • Evita la exposición a ruidos fuertes y, si trabajas en entornos ruidosos, usa protección auditiva.
  • Sigue de cerca tu salud emocional. Terapias psicológicas o grupos de apoyo pueden ayudarte a gestionar el impacto mental del tinnitus.

Entonces

El tinnitus no es una condena, pero sí es una señal de alerta. Nuestro cuerpo nos habla constantemente, y este zumbido puede ser la forma en que te está pidiendo que prestes atención a lo que ocurre en tu interior. No te desesperes, no estás solo, y sobre todo: hay muchas formas de mejorar tu calidad de vida si tomás el control paso a paso.

Y vos, ¿ya empezaste a revisar las posibles causas? Guardá esta lista, compartila con alguien que lo necesite y comenzá hoy mismo a buscar alivio.