Un reciente estudio ha presentado un caso único en el que el tinnitus cervicogénico crónico, considerado intratable durante 20 años, se resolvió rápidamente mediante el uso intermitente de un collarín cervical (CC). – (Imagen de freepik).
Este hallazgo podría abrir nuevas perspectivas en el tratamiento de esta afección, que hasta ahora no ha sido ampliamente reconocida como un subtipo patogénico del tinnitus, pero que podría incluirse bajo el concepto de tinnitus somatosensorial.
El caso y metodología del estudio
El paciente en cuestión sufría de tinnitus crónico resistente al tratamiento, asociado con un síndrome de dolor cervical (SDC). Tras experimentar una mejora significativa al utilizar un collarín cervical, los investigadores decidieron explorar más a fondo este fenómeno. Se diseñó un estudio para replicar experimentalmente el tinnitus del paciente mediante:
- Inclinación controlada de la cabeza: Se ajustaron los ángulos entre el cuello y la cabeza para observar cambios en los síntomas.
- Medición del flujo sanguíneo cerebral: Se evaluó si las alteraciones en la posición de la cabeza afectaban la circulación sanguínea en las arterias vertebrales.
Resultados significativos
- Resolución completa del tinnitus: Después de cuatro semanas utilizando el collarín cervical de forma intermitente, el paciente reportó la desaparición total de los síntomas de tinnitus.
- Reaparición inducida del tinnitus: Al inclinar la cabeza hacia adelante 14 grados, el tinnitus reapareció, alcanzando su máxima intensidad a los 23 grados de inclinación. Al regresar a la posición neutral, los síntomas desaparecieron nuevamente.
- Flujo sanguíneo inalterado: Durante la inclinación de la cabeza que provocaba tinnitus, no se observaron cambios significativos en el flujo sanguíneo de las arterias vertebrales. Sin embargo, la rotación de la cabeza sí redujo el flujo sanguíneo de forma fisiológica, aunque sin provocar tinnitus.
Interpretación de los hallazgos
Estos resultados sugieren que el tinnitus cervicogénico puede estar influenciado por factores mecánicos relacionados con la postura y la musculatura cervical, especialmente los músculos cervicales posteriores superiores. La ausencia de cambios en el flujo sanguíneo durante la inclinación que inducía tinnitus indica que la causa podría no estar relacionada con la circulación arterial vertebral.
Los investigadores también señalan que estos hallazgos coinciden con estudios en animales, donde se ha observado que la manipulación de ciertos grupos musculares cervicales puede influir en la aparición de tinnitus. Además, se sugiere que factores psicológicos y otros desencadenantes podrían jugar un papel en la manifestación de los síntomas.
Implicaciones para el tratamiento del tinnitus
Este caso único plantea la posibilidad de que el uso de collarines cervicales pueda ser una opción terapéutica efectiva para el tinnitus cervicogénico crónico. Al proporcionar soporte y limitar movimientos que podrían desencadenar los síntomas, el collarín cervical podría ayudar a reducir o eliminar el tinnitus en ciertos pacientes.
Sin embargo, es importante considerar que:
- Se trata de un solo caso: Los resultados obtenidos necesitan ser confirmados mediante estudios adicionales y con una muestra más amplia de pacientes.
- No se debe generalizar: Aunque los hallazgos son prometedores, no todos los casos de tinnitus cervicogénico podrían responder de la misma manera al uso de collarín cervical.
- Enfoque multidisciplinario: La combinación de terapias físicas, manejo del dolor y apoyo psicológico podría ofrecer mejores resultados.
Conclusiones
El estudio sugiere que el tinnitus cervicogénico crónico puede resolverse rápidamente con el uso intermitente de un collarín cervical, posiblemente debido a la influencia en los músculos cervicales superiores y la postura de la cabeza.
Aunque el flujo sanguíneo en las arterias vertebrales no parece estar involucrado, se requieren más investigaciones para comprender completamente los mecanismos detrás de este fenómeno y para establecer protocolos de tratamiento efectivos.
Fuente: ncbi.nlm.nih.gov