Muchas personas a menudo sufre problemas de presión en los oídos cuando viaja en avión o en tren, o cuando realiza la práctica del buceo o paracaidismo, según se revela en este artículo publicado originalmente por el sitio web quierooir.com. – Imagen ilustrativa de StockSnap en Pixabay.
El trastorno se conoce como barotrauma y es debido a un desequilibrio entre la presión del aire en el oído interno y la exterior, de ahí que los cambios bruscos de altitud sean su principal desencadenante.
Los síntomas principales que suelen aparecer son taponamiento, una leve hipoacusia o sordera, acúfenos o tinnitus, dolor y, en los casos más graves, rotura del tímpano y sangrado o incluso vértigo períferico. Para evitarlos se pueden seguir los siguientes consejos:
➢Evitar volar si se padece un resfriado o episodios alérgicos. Si no es posible, se recomienda tomar la medicación adecuada.
➢Movimientos de mandíbula: tanto en el aterrizaje como en el despegue se puede regular la presión con movimientos mandibulares como el bostezo o la masticación. Puede ser útil mascar chicle y, en el caso de los niños, el uso del chupete o el biberón.
➢Maniobra de Valsalva: consiste en tomar aire, tapar la nariz y la boca y soplar para aumentar la presión en la faringe. Así se consigue ventilar el oído.
➢Evitar dormir durante el viaje: durante el sueño el mecanismo de deglución se ralentiza, al igual que la regulación de la presión.
➢Evitar sumergirse a grandes profundidades si se tiene predisposición a sufrir los cambios de presión
Vía: quiero oir