Los antidepresivos forman un grupo diverso de fármacos utilizados en psiquiatría, y aunque han sido ampliamente empleados para tratar los acúfenos, es sorprendente que muchos de ellos tengan como efecto secundario la generación de acúfenos. – Imagen de azerbaijan_stockers en Freepik.
Al revisar varios antidepresivos utilizados en pacientes con acúfenos, es crucial tener en cuenta la alta comorbilidad de ansiedad y depresión en estos individuos.
Un estudio que evaluó a 71 pacientes con acúfenos reveló que el 38% tenía un estado de ánimo bajo y el 29.6% sufría de depresión moderada o severa.
La relación entre acúfenos y ansiedad-depresión no está clara, y resulta complicado separar el efecto del antidepresivo sobre el acúfeno de su impacto en la depresión, a menos que los ensayos clínicos estratifiquen a los pacientes según la presencia o ausencia de depresión.
Inicialmente, se estudiaron antidepresivos tricíclicos como la amitriptilina, que mostró eficacia en algunos casos de acúfenos y depresión. Sin embargo, los estudios con nortriptilina y trimipramina no arrojaron resultados significativos en comparación con el placebo.
En los últimos años, se han realizado investigaciones con inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) como la paroxetina y la sertralina.
Aunque la paroxetina no mostró diferencias significativas en pacientes con acúfenos y sin depresión, hubo indicios de mejora en un subgrupo que recibió dosis más altas.
En el caso de la sertralina, se observó una mejoría significativa en la severidad e intensidad de los acúfenos, correlacionada con una mejoría en los parámetros de ansiedad y depresión.
Algunos expertos sugieren que los pacientes con acúfenos que también padecen depresión o ansiedad, aquellos con acúfenos más severos o los tratados durante más tiempo con una dosis adecuada de medicación pueden responder mejor a los antidepresivos.
Sin embargo, revisiones sistemáticas concluyen que la evidencia aún no es suficiente para afirmar que los antidepresivos mejoren los acúfenos, aunque puedan aliviar los síntomas de depresión con posibles efectos adversos como sequedad de boca, visión borrosa y estreñimiento.
Fuente: Ponencia Oficial XXIV Congreso de la Sociedad Andaluza de Otorrinolaringología y Patología Cérvico-Facial.