Usted corre un mayor riesgo de tener enfermedades cardio-cerebro-vasculares y derrames cerebrales si tiene pérdida de audición neurosensorial súbita, según ha hallado un estudio.
Otro estudio ha descubierto que una pérdida de audición neurosensorial súbita en combinación con vértigo presagia un mayor riesgo de derrames cerebrales. Las personas que han experimentado pérdida de audición neurosensorial súbita (SSHL, siglas en inglés) corren mayor riesgo de enfermedades cardio-cerebro-vasculares (CCVD, siglas en inglés) y derrames cerebrales, según un estudio coreano.
Los investigadores a cargo del estudio descubrieron, después de ajustar con otros factores, que la tasa de riesgo de enfermedades cardio-cerebro-vasculares durante el periodo de seguimiento del estudio de 11 años era 2,18 veces más alta para las personas que convivían con pérdida de audición neurosensorial súbita en comparación al grupo de control sin este problema. El riesgo de un derrame cerebral era dos veces mayor si se había experimentado pérdida de audición neurosensorial súbita.
Otro estudio en Taiwán halló que la combinación de pérdida de audición neurosensorial súbita y vértigo se asocia con un riesgo mayor de sufrir un derrame cerebral en comparación a tener solamente pérdida de audición neurosensorial súbita o vértigo. Las tasas de derrames cerebrales al concluir el estudio eran del 5,5% con pérdida de audición neurosensorial súbita y vértigo, 3,0% con solo pérdida de audición neurosensorial súbita y 3,9% solo con vértigo.
Los estudios
El estudio “Association of Sudden Sensorineural Hearing Loss With Risk of Cardiocerebrovascular Disease” se llevó a cabo con 770 pacientes, de los cuales 154 fueron diagnosticados con pérdida de audición neurosensorial súbita. El estudio se publicó en la revista JAMA Otolaryngology – Head & Neck Surgery en diciembre de 2017.
El estudio “Sudden Hearing Loss with Vertigo Portends Greater Stroke Risk Than Sudden Hearing Loss or Vertigo alone” examinó a 218.656 pacientes identificados en la Base de Datos del Seguro de Salud Nacional de Taiwán y se publicó en la revista en Journal of Stroke and Cerebrovascular Diseases en noviembre de 2017.
Fuentes: https://www.hear-it.org, JAMA Otolaryngology – Head & Neck Surgery y Journal of Stroke and Cerebrovascular Diseases