Cuidado auditivo: Por qué debes dejar de usar hisopos inmediatamente

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A lo largo de los años, nuestras madres nos han enseñado la importancia de limpiar regularmente nuestras orejas con hisopos o cotonetes. Imagen de Freepik.

Sin embargo, te revelamos por qué es imperativo abandonar esta práctica de inmediato si deseas preservar la salud auditiva.

¿Qué son los hisopos? Un hisopo o cotonete es un utensilio utilizado para recopilar muestras con fines de estudio, comúnmente en medicina para identificar el agente infeccioso de una infección.

Su estructura consiste en un bastoncillo con una punta de algodón. Existe también otro tipo de hisopo destinado a la limpieza del conducto auditivo.

¿Qué opinan los médicos?

Los otorrinolaringólogos advierten categóricamente contra el uso de hisopos para limpiar las orejas. ¿La razón? Al introducir un hisopo en el oído, lo único que logramos es empujar la cera hacia el interior.

Este acto no solo resulta en la formación de un tapón auditivo, sino que con el tiempo aumenta la probabilidad de padecer infecciones y afecciones auditivas como otitis y laberintitis, entre otras.

Además, existe el riesgo de dañar la membrana timpánica si se realiza un movimiento incorrecto. Es crucial tener en cuenta que manipular los oídos estimula la producción de cera por parte de las glándulas.

¿Cuál es la función de la cera en los oídos?

El oído posee la capacidad única de limpiarse por sí mismo. Cuenta con glándulas ceruminosas que generan cerumen, una sustancia que no solo lubrica el conducto auditivo externo, sino que también lo mantiene impecablemente limpio.

Además, el oído está equipado con cilias, unos vellos particulares que al moverse hacia el exterior eliminan todas las partículas extrañas provenientes del entorno. La combinación de cerumen, lubricación y vello protege eficazmente nuestros oídos.

En casos de acumulación excesiva de cerumen, es aconsejable consultar a un especialista, evitando introducir cualquier objeto en los oídos para su eliminación.

Ahora sabes que JAMÁS debes utilizar hisopos para limpiar el interior de tus oídos. No obstante, su uso es seguro para limpiar la superficie externa de la oreja, ya que suele acumular suciedad en los pliegues del cartílago.