Cuando el tinnitus surge inicialmente, se manifiesta como una experiencia novedosa, sin patrones de memoria previos ni una forma clara de categorizarlo. – Imagen de brgfx en Freepik.
Cualquier experiencia nueva desencadena una «respuesta» que requiere atención hasta que se logre clasificar y comprender la señal.
Aunque algunos pacientes experimentan solo molestias leves debido al tinnitus, esto suele ser suficiente para buscar ayuda. La pregunta común y razonable es: ¿Se intensificará? ¿Persistirá indefinidamente?
El Tinnitus como una Amenaza
- Para muchos individuos, el tinnitus se percibe como altamente amenazante.
- Algunos temen que su acúfeno sea un síntoma de una enfermedad grave.
- Existe la convicción de que el «zumbido post-discoteca» indica un daño auditivo permanente, en lugar de cambios temporales normales.
- Preocupa a algunos pacientes que el tinnitus pueda ser un indicio de un tumor cerebral, embolias o trastornos mentales graves.
- Hay inquietudes acerca de que el tinnitus se intensifique, persista indefinidamente y no tenga cura.
- La idea de que el tinnitus invade el «derecho al silencio» también se percibe como una amenaza.
- A menudo, se teme que el tinnitus perturbará la paz y la tranquilidad personal, interfiriendo con el trabajo, las actividades recreativas y el sueño.
Consejos Equivocados
Lamentablemente, estos temores pueden ser alimentados por asesoramientos médicos inadecuados o comentarios negativos de otros pacientes que han tenido experiencias desfavorables con el tinnitus.
Algunos profesionales indican a los pacientes que no hay solución para el tinnitus y que lo padecerán de por vida. Además, existe el temor infundado de que el tinnitus señala una pérdida auditiva en lugar de ser una consecuencia de una leve deficiencia relacionada con la edad. Las creencias y pensamientos negativos sobre el tinnitus refuerzan sus características molestas.
El Tinnitus como Experiencia Fóbica
En ciertos casos, el miedo extremo al tinnitus conduce al desarrollo de una fobia similar al miedo a las arañas, espacios pequeños, volar, etc. El tratamiento de estas fobias implica un proceso gradual de «desensibilización», enfrentándose al objeto temido, aprendiendo a experimentarlo sin reaccionar y finalmente aceptándolo como un fenómeno normal sin amenaza.
Muchos aspectos del reentrenamiento del tinnitus comparten similitudes con estas técnicas. Aunque en algunas personas la respuesta al tinnitus es más sutil, persiste una incomodidad y molestia, estimulando emociones desagradables que afectan la calidad de vida.
Estas respuestas emocionales aseguran la persistencia del tinnitus en lugar de una habituación natural, y van más allá de los mecanismos auditivos, lo que explica los fracasos de los tratamientos previos al desarrollo del TRT en la década de 1990.